En esta ocasión la historia transcurre en Iowa. Allí una chica, Lori Sorenson después de elegir con su amiga la ropa que se va a poner, se marcha a una cita con su novio. En la 9 Mile Road, cerca de un puente, esa noche, ambos en el coche creen ver una sombra, como una figura. Empiezan a oir sonidos extraños y Rich, el novio de Lori sale del coche a ver qué ocurre. Algo invisible lo asesina y lo cuelga encima del coche. Lori asustada por los ruidos que se oyen en el techo sale del coche viendo a su novio asesinado.
Dean y Sam leen la noticia del asesinato en el periódico y deciden investigar. Se hacen pasar por estudiantes universitarios y se alojan en una hermandad. Allí hablan con su compañero de habitación sobre los crímenes y él les cuenta que Rick era el novio de Lori, la hija del Reverendo.
Van a la iglesia y allí el Reverendo Sorenson está oficiando un funeral por Rick. Cuando termina hablan con Lorie y Sam, pensando en Jessica, le dice que sabe lo que siente ante la pérdida de su novio. Ella les presenta al Reverendo y, mientras Dean lo distrae, Sam intenta sacar más información acerca de lo que ocurrió realmente. Lorie le dice que vió cosas pero que nadie la cree.
Con toda la información que tienen Sam y Dean investigan en la biblioteca y creen que puede tratarse de Hookman (el hombre del garfio) una leyenda de medidados del siglo diecinueve. Sam encuentra el caso de un cura llamado Jaco Karns que asesinó a 13 prostitutas en 1862 con su garfio de plata (había perdido la mano en un accidente). Los asesinatos ocurrieron en la 9 Mile Road, el mismo sitio donde asesinaron a Rick.
Esa noche Lori discute con su padre. Ella quiere ir a la fraternidad a dormir y su padre quiere que se quede en casa. Decide irse a dormir con su compañera de habitación. Mientras tanto, Sam y Dean han ido a buscar a Hookman y lo que encuentran es a la policía que los detiene al verlos allí armados. Ellos les cuentan que era una novatada y así consiguen dejarlos salir.
Pero, por la mañana, Lori encuentra a su compañera asesinada y alguien ha escrito con sangre en la pared de la habitación.
Sam y Dean entran en la hermandad para investigar el nuevo crimen. Lo tienen claro, los asesinatos son cometidos por el espíritu de Jacob Karnas. Saben que tienen que encontrar sus restos y quemarlos para parar ésto. Averiguan que fue enterrado en algún lugar en el Old North Cementery en una lápida sin nombre.
Investigando más, Sam encuentra unos artículos en los que aparecen reverendos envueltos en asesinatos en 1932 y 1967, en ambos casos con garfios. Los chicos piensan que el padre de Lori es el que controla a Hookman con su mentalidad represora. Dean va a buscar la tumba mientras Sam se queda vigilando a Lori.
Dean encuentra la tumba con la marca de Hookman y quema los huesos, mientras Sam ve como Lori y su padre discuten. Ésta sale de la casa y se sincera al ver a Sam. No soporta que su padre intente reprimirla cuando ella ha descubierto que él tiene una aventura con una mujer casada. En ese momento, justo cuando Sam y Lori se están besando, Hookman aparece y ataca al reverendo, pero por suerte Sam impide que pueda matarlo.
Pero si Dean ha quemado lo huesos, ¿por qué Hookman no ha desaparecido? Dentro del ataúd no estaba el garfio y deben encontrarlo porque es el objeto que aún mantiene al espíritu en la tierra. Sam y Dean además tienen claro que el espíritu no está dirigido por las emociones del reverendo, sino por las de Lori.
De nuevo toca investigar en la biblioteca con el fin de encontrar el paradero del garfio. La conclusión a la que llegan es que debe estar en la iglesia, pero el garfio se refundió y con el se hizo otro objeto y los chicos no saben cual. Por ello deciden ir a la iglesia y quemar todo lo que encuentren de plata.
Sin embargo, la situación se volverá complicada cuando Hookman los encuentre allí e intente matarlos.
¿Encontrarán a tiempo Dean y Sam el objeto que tienen que quemar?¿Conseguirán que Hookman desaparezca?¿Tendrán Sam y Lori una bonita historia de amor?
No hay comentarios:
Publicar un comentario